Santiago 2:1-10
Sabemos perfectamente, pues no es ningún secreto, que dentro de las organizaciones religiosas se hacen acepciones de personas. Es más, hay "iglesias" donde solamente concurren personas millonarias, personajes políticos, y famosos, donde los cordones de seguridad no permiten que un "pelagatos" se introduzca.
Esto, "socialmente" es aceptable, pero, es inaudito que en una congregación de personas pobres y de clase media se vea, no solamente esta separación de clases sociales, sino también la preferencia por las personas que más aportan económicamente a la "iglesia".-
Un día mientras estaba reemplazando unos calentadores de agua en un edificio de apartamentos aquí en Miami, conocí a un hermano y entre pláticas me contó que él era uno de los músicos del grupo de alabanzas de la iglesia donde se congregaba, pero en una época en que se quedó sin trabajo, dejó de "diezmar" y el pastor lo suspendió como músico y le dijo que sería restaurado nuevamente con el grupo, hasta que pagara los diezmos anteriores y se pusiera al día con ellos.-
Otro hermano me escribió a mi correo privado, diciéndome que en su iglesia hacen acepciones de personas, pues hay muchos hermanos que, aunque tienen algunos años congregándose y tienen dones administrativos y espirituales [predicadores, maestros, sanidad, milagros, músicos, coristas, ujieres, etc.], no los usan ni los mencionan en la iglesia simplemente porque nunca los han oído hablar en lenguas. Por este motivo, muchos se han ido de la iglesia, y otros al mundo.
Esto me recuerda una anécdota de un hombre joven, vestido como se visten los jóvenes de hoy día, y de escasos recursos, que mientras estaba sentado a la orilla de la acera, muy cerca de la entrada de una iglesia, se le acercó un hombre y le dijo: -Querido amigo, ¿Por qué estás tan triste? ¿Por qué veo lágrimas en tus ojos?
Nuestro personaje le contestó: -Porque tres veces he intentado entrar a la iglesia que está a mis espaldas para alabar a Mi Creador y las tres veces me han sacado los ujieres y esta última vez a empellones y con amenazas de llamar a la policía.
El hombre que se le había acercado le dijo: -No te preocupes por eso, no eres el único, yo llevo más de diez años tratando entrar y tampoco me lo han permitido. -Entonces nuestro personaje le preguntó: ¿Y tú quien eres? Y el hombre le contestó: YO SOY JESUS, EL TODOPODEROSO.-
Santiago 2:1-10 nos dice: Hermanos míos, que vuestra fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo sea sin acepción de personas. Porque si en vuestra congregación entra un hombre con anillo de oro y con ropa espléndida, y también entra un pobre con vestido andrajoso, y miráis con agrado al que trae la ropa espléndida y le decís: Siéntate tú aquí en buen lugar; y decís al pobre: Estate tú allí en pie, o siéntate aquí bajo mi estrado; ¿no hacéis distinciones entre vosotros mismos, y venís a ser jueces con malos pensamientos?
Hermanos míos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios a los pobres de este mundo, para que sean ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman? Pero vosotros habéis afrentado al pobre. ¿No os oprimen los ricos, y no son ellos los mismos que os arrastran a los tribunales? ¿No blasfeman ellos el buen nombre que fue invocado sobre vosotros?
Si en verdad cumplís la ley real, conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, bien hacéis; pero si hacéis acepción de personas, cometéis pecado, y quedáis convictos por la ley como transgresores.
!LA PAZ DE CRISTO ¡
Esto, "socialmente" es aceptable, pero, es inaudito que en una congregación de personas pobres y de clase media se vea, no solamente esta separación de clases sociales, sino también la preferencia por las personas que más aportan económicamente a la "iglesia".-
Un día mientras estaba reemplazando unos calentadores de agua en un edificio de apartamentos aquí en Miami, conocí a un hermano y entre pláticas me contó que él era uno de los músicos del grupo de alabanzas de la iglesia donde se congregaba, pero en una época en que se quedó sin trabajo, dejó de "diezmar" y el pastor lo suspendió como músico y le dijo que sería restaurado nuevamente con el grupo, hasta que pagara los diezmos anteriores y se pusiera al día con ellos.-
Otro hermano me escribió a mi correo privado, diciéndome que en su iglesia hacen acepciones de personas, pues hay muchos hermanos que, aunque tienen algunos años congregándose y tienen dones administrativos y espirituales [predicadores, maestros, sanidad, milagros, músicos, coristas, ujieres, etc.], no los usan ni los mencionan en la iglesia simplemente porque nunca los han oído hablar en lenguas. Por este motivo, muchos se han ido de la iglesia, y otros al mundo.
Esto me recuerda una anécdota de un hombre joven, vestido como se visten los jóvenes de hoy día, y de escasos recursos, que mientras estaba sentado a la orilla de la acera, muy cerca de la entrada de una iglesia, se le acercó un hombre y le dijo: -Querido amigo, ¿Por qué estás tan triste? ¿Por qué veo lágrimas en tus ojos?
Nuestro personaje le contestó: -Porque tres veces he intentado entrar a la iglesia que está a mis espaldas para alabar a Mi Creador y las tres veces me han sacado los ujieres y esta última vez a empellones y con amenazas de llamar a la policía.
El hombre que se le había acercado le dijo: -No te preocupes por eso, no eres el único, yo llevo más de diez años tratando entrar y tampoco me lo han permitido. -Entonces nuestro personaje le preguntó: ¿Y tú quien eres? Y el hombre le contestó: YO SOY JESUS, EL TODOPODEROSO.-
Santiago 2:1-10 nos dice: Hermanos míos, que vuestra fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo sea sin acepción de personas. Porque si en vuestra congregación entra un hombre con anillo de oro y con ropa espléndida, y también entra un pobre con vestido andrajoso, y miráis con agrado al que trae la ropa espléndida y le decís: Siéntate tú aquí en buen lugar; y decís al pobre: Estate tú allí en pie, o siéntate aquí bajo mi estrado; ¿no hacéis distinciones entre vosotros mismos, y venís a ser jueces con malos pensamientos?
Hermanos míos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios a los pobres de este mundo, para que sean ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman? Pero vosotros habéis afrentado al pobre. ¿No os oprimen los ricos, y no son ellos los mismos que os arrastran a los tribunales? ¿No blasfeman ellos el buen nombre que fue invocado sobre vosotros?
Si en verdad cumplís la ley real, conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, bien hacéis; pero si hacéis acepción de personas, cometéis pecado, y quedáis convictos por la ley como transgresores.
!LA PAZ DE CRISTO ¡
By Juan F. Roa
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